Hace unas semanas tuve el honor de participar en la
re-interpretación de una de las obras fotográfica de unos amigos, cuya
exposición, 'Otra Mirada', pudo disfrutarse en 'Tu Petit Cafe', en la capital.
Pedro e Iraya, Iraya y Pedro, me ofrecieron observar con mis ojos uno de sus
trabajos, en concreto el que aparece en la imagen de abajo (titulado 'Gezi',
obra de Pedro), aportando un texto inspirado en la misma.
Quién diría que en un ser humano tienen cabida tanto
un sol como una alambrada.
Invisible y dañino, el frío y oscuro acero invade,
araña y lastima con sus uñas lo que se le interpone; demarca, limita, te apresa
en la ceguera y encierra a quienes te sobran. Ceño fruncido el tuyo, dedo que
acusa, recelo que margina silenciosamente.
Aquí llega el cálido sol, brillante pero no cegador,
libertario aunque formal en su danza. Con abrazo acogedor ya viene, implacable,
dispuesto a colocarte a ambos lados del alambre. Nada de lo humano le es ajeno,
y desea compartirlo contigo.
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